ABSTRACT
Se estudia la historia médica de un paciente de 56 años de edad, quien tuvo un adenocarcinoma, de células diferenciadas, en el ciego y en el colon trasverso proximal; y, posteriormente, doce años después, un adenocarcinoma primário tubula, de células poco diferenciadas, localizado en el duodeno. En la primera intervención quirúrgica se le practicó la hemicolectomía derecha ampliada y la anastomosis del íleo al colon transverso distal. En la segunda, la resección del tumor duoenal, con un segmento del yeyuno proximal y el colon ixquierdo "in toto". Actualmente se encuentra bien, cuatro años después de la segunda operación
Subject(s)
Aged , Humans , Male , Adenocarcinoma/pathology , Duodenal Neoplasms/pathology , Adenocarcinoma/surgery , Cecal Neoplasms/surgery , Cecal Neoplasms/pathology , Colonic Neoplasms/surgery , Colonic Neoplasms/pathology , Stomach Neoplasms/surgery , Neoplasms, Multiple Primary/surgery , Intestinal Polyps/pathologyABSTRACT
El propósito de este estudio fue determinar la efectividad y la toxicidad del estibogluconato sódico y del antimoniato de glucantime, en las dosis recomendadas por la Organización Mundial de la Salud (OMS), en el tratamiento de la leishmaniasis cutánea. Con tal objeto tratamos un grupo de 59 pacientes, que tenían leishmaniasis cutánea causada por L. braziliensis panamensis y fueron seleccionados al azar. Estos pacientes recibieron glucantime o pentostam durante 20 días, en dosis diaria de 20 mg de Sb por Kg de peso, por vía intramuscular (hasta un máximo de 850 mg, diariamente). Las dos drogas antimoniales fueron igualmente efectivas. Un total de 35 pacientes (70%) se hizo negativo parasitológicamente al finalizar el tratamiento y todos permanecieron cicatrizados después de 6 a 12 meses de seguimiento; en un grupo de 13 (26%) casos cicatrizó la lesión, pero se reactivó de 1 a 6 meses después del tratamiento; y en otros dos (4%) pacientes se observó una cicatrización incompleta y la persistencia de los parásitos hasta por 2 meses. En 58% de los casos notamos efectos levemente adversos, tales como mialgias, artralgias, cefalea y fiebre. En ningún caso observamos toxicidad hepática, hematológica, cardíaca o renal. Un descenso progresivo en los títulos y la seronegativización se observó, por inmunofluorescencia indirecta, en los pacientes curados